Muestra pictórica de la autora del Dimensionalismo del 11 al 21 de septiembre de 2007 en Museo Casa de la Moneda, en el marco del VIII Congreso Nacional del Color, organizado por la Sociedad Española de Óptica

Francisca Blázquez, la luminiscencia cromático espiritual del Dimensionalismo

El Museo Casa de la Moneda presenta del 11 al 21 de septiembre de 2007 16 obras pictóricas de la serie Dimensionalismo de la autora madrileña multidisciplinar Francisca Blázquez dentro del contexto del VIII congreso Nacional del Color, organizado por la Sociedad Española de Óptica, que tendrá lugar del 19 al 21 de septiembre de 2007.

La artista plástica madrileña, autora del Dimensionalismo, teoría geométrica basada en la existencia de diferentes dimensiones físico-químicas, espaciales, temporales, espirituales y materiales, en las que el color juega un papel esencial como vibración y evidencia determinante, se ha concentrado, en esta ocasión, en una fantástica propuesta plástica donde la sensibilidad exquisita del color y la fuerza del cromatismo se armonizan con espectaculares geometrías de inusitada y exuberante belleza espiritual.

La sede de dicha exposición es el Museo Casa de la Moneda, que se encuentra emplazado en dependencias de la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre, reflejando en sus colecciones tanto la historia del Dinero como los diferentes tipos de producción del mismo. El Museo está situado en la calle Doctor Esquerdo, nº 36 de la capital de España, siendo dirigido por Joan Teodoro. Además es sede del Comité Español del Consejo Internacional de Museos (ICOM).

Francisca Blázquez elabora un discurso plástico basado en la luminiscencia cromático espiritual del Dimensionalismo basada en haces de luz, trasparencias, efectos ópticos de gran calidez y sensibilidad, en la que destaca su apuesta sutil y sensible. 

DESPEGUE LUMÍNICO

(FRANCISCA BLÁZQUEZ)

Configura escenarios que representan el espacio interestelar, galaxias, mundos lejanos, planetas, estrellas, pero también, alegóricamente, seres espirituales, ángeles, arcángeles y aspectos vibracionales y energéticos, la fuerza de la luz, entendida como comunicación simbólica del alma o entidad interior que todo lo existente posee. De ahí que, sin renunciar a la ciencia, a los paradigmas y misterios que esta ofrece y desvela, también se adentra en los particulares laberintos de la propia complejidad de lo espiritual. Vibración entendida como intensidad lumínica, como vertebración trascendente, en la que lo significativo se basa en la particularidad de exhibir la grandiosidad de la luz.

Multidisciplinar, aunque esencialmente pintora, la autora del Dimensionalismo investiga constantemente nuevas formas, inspirándose en lo que le dicta su interior, también se basa en el mundo de los sueños, en la propia existencia, en la contemplación del cosmos y en las creencias espirituales.

Comprometida con la sociedad del momento, investigadora, de mentalidad arquitectónica y científica, matemática, construye una creación, de formas elaboradas, donde el color predomina, con presencia de degradados, difuminados, trasparencias, haces de luz y luminiscencias que acentúan el carácter mágico-sagrado de lo que representa.

Constatamos la armonía entre la ciencia y la mística en un contexto en el que los efluvios ópticos energéticos derivados de las complejas formas y la intensidad del color son la mejor evidencia de la transparencia de su discurso pictórico.

La belleza se halla en todo lo existente, donde lo más perfecto es armonioso consigo mismo.
La perfección es un estadio de la evolución, dado que si está claro que lo elemental aspira a la perfección, contiene, también el aura de la armonía. De ahí que su discurso apueste por la belleza en un momento crucial de la historia de la humanidad en la que domina el feísmo.
 

Joan Lluís Montané
De la Asociación Internacional de Críticos de Arte